Los noájidas y las religiones monoteístas.

La tradición judía ha respetado tradicionalmente la libertad de cada una de las naciones para seguir su propia cultura, debido sobre todo a su actitud antimisionera. Con lo que respeta a otras religiones ya es otro cantar. El judaísmo tradicional ve la creación de religiones como malignas para la sociedad, y surgidas originalmente de los cultos idolátricos y politeístas. La postura tuvo que ponerse a debate con el transcurso de la historia, ya que los cultos triunfantes en el mundo han sido precisamente los monoteístas (Cristianismo e Islam), que irónicamente bebían de las fuentes del judaísmo.

Surge entonces la cuestión de si cristianos y musulmanes cumplen las espectativas de la ética noájida.
Si nos fijamos en los supuestos de los que parten dichas religiones, el antagonismo con el judaísmo es evidente, ya que o bien se trata el Tanaj como anticuado o superado (caso del cristianismo) o como válido en parte pero corrupto (islam). Es por tanto lógico que el noajismo desaliente el culto a otras religiones. Por otro lado las dos religiones reconocen el papel del judaísmo como precursores y primeros eslabones de la revelación divina.
Si nos fijamos en la práctica, el panorama cambia, ya que estas religiones cumplen con los preceptos principales que originalmente los judíos exigían de las naciones. El cristianismo tiene a las 7 leyes de Noé integradas en su credo. La gran pega que se le ha puesto al cristianismo es precisamente la base de las creencias: la divinidad de Jesús de Nazaret, algo que generalmente condenado por el judaísmo y que incumple el mandamiento contra la idolatría o el de la blasfemia ( El hecho de pensar que una persona es Dios es impensable). El Islam cumple en teoría con los 7 mandamientos , si bien la manera de entender y aplicar la justicia está alejada en muchos aspectos de la visión judía.

Además de los argumentos legales, la historia ha influído en la consideración de los judíos hacia cristianos y musulmanes. Durante siglos, los judíos fueron oprimidos, perseguidos y asesinados en nombre del dios que en teoría compartían con los cristianos. La agresividad hacia el pueblo judío ha ido incrementandose en los últimos años dentro del mundo islámico. Es por tanto lógico que exista por lo general, una perspectiva crítica hacia estas religiones.

El rabino Yehuda Ribco, que dirige la página Serjudio.com es especialmente crítico con el cristianismo:

" {Jesús}fue voluntariamente un completo y total impostor,en su presunción de ser el Mesías (es decir, rey de Israel),ya que no llegó a cumplir siquiera UNA de las profecías VERDADERAMENTE mesiánicas."

"Jesús... para los que en él ponen su fe no sólo es pérdida de tiempo ,que es igual a pérdida de vida,sino que es activa pérdida de la porción de Paraíso que Dios ha destinado para Sus criaturas."

"El cristianismo tiene infinidad de facetas positivas, muchísimas ideas y propuestas de acciones edificantes. Sin dudas que numerosos aspectos del cristianismo son de elogio y de ejemplo.¿Quién duda que sostener preceptos como "no robar", o "no matar", o "ayudar al necesitado", o "respetar a los padres", entre otros, no son invaluables y meritorios?(...)Pero, el enorme defecto (...) del cristianismo radica en su rebeldía contra Dios al adorar y adherirse a Ieshu/Jesús, en lugar de buscar al verdadero Uno y Único Dios"

Por otro lado, Jonathan Sacks, en su texto "Dignity of Difference" recoge testimonios de rabinos que recurriendo a la Halajá ven permisible al cristianismo y al islam por su práctica ética.

Maimónides , en sus discusiones sobre la Halajá considera a los musulmanes como noájidas de facto:
"los musulmanes no son idólatras. La idolatría fue borrada de sus corazones y bocas y creen en la unicidad de Dios" (...) "

Rabi Israel Lipschutz recurrió a un concepto de Torá más extensivo en el que justificaba las creencias religiosas de otros pueblos, que consideraban verdad revelada, la vida tras la muerte y el castigo o recompensa

Jacon Emden, un rabino del siglo XVII que en sus publicaciones ponía en duda la autoría o legitimidad de ciertas tradiciones judías, tenía una consideración amable con el cristianismo. Él afirmaba:

"El Nazareno trajo dos bienes al mundo. Por un lado fortaleció la Torá de Moises majestuosamente y ninguna de nuestros textos describió tan enfáticamente su inmutabilidad. Por otro lado hizo mucho bien a los gentiles, les alejó de la idiolatría y alejó las imagenes de sus mentes, les obligó a seguir los mandamientos de Noé y caminos éticos, y fue mucho más severo para su cumplimiento que la Torá de Moisés"


Como en otras muchas cuestiones no existe una opinión consensuada sobre la relación entre el pueblo judío y las religiones monoteístas. Una opinión intermedia, que es generalmente aceptada, es que las religiones cristiana y musulmana, pese a no ser correctas en un sentido estricto, si tienen, en la práctica, conductas válidas que coínciden en gran parte con los principios noájidas.

Fuentes:
-www.Serjudio.com
-www.chiefrabbi.org